En una entrevista el músico portugués Rodrigo Leão nos dijo que la melancolía teñía su música, pero esa tristeza, no saudade, esa extraña sensación de dolor y alegría, abarcaba todo un universo de exploración musical único e impugnable. Mariza nos habla de esa misma sensación. De la capacidad que tienen el flamenco y el fado de transmitir las emociones humanas más profundas: el dolor, la alegría, la melancolía y la esperanza.
El brochazo que cubre la Península Ibérica en el lado Atlántico llamado Portugal, está dotado de esa conexión especial, endémica, la genuina y única capacitada para descubrir, en una aventura inigualable, tierras musicales desconocidas, al estilo Magallanes. De esos viajes oceánicos, una ola sutil y suave nos deja en la orilla a la cantante mozambiqueña, temerosa al principio, potente y segura ahora. Del ese fado exótico, de raíces clásicas y chispazos coloniales surge la chica que creció en el barrio de Mouraria, entre resonancias de Amalia y aromas de café.
Un clásico en el Festival de Flamenco y Fado, una cita obligada cada cierto tiempo, una visita musical con el que soñar que, y como decía Rui Nabeiro, la frontera se cruza, la raia se camina…de la mano de Mariza.
Mariza y el Festival de Flamenco y Fado de Badajoz, antes conocido como Badasom van de la mano, no se entiende este festival sin tu figura. ¿Qué sensación te genera actuar en este lado fronterizo de la raia?
Actuar en Badajoz siempre es una experiencia única y muy especial para mí. Este festival, que une el flamenco y el fado, representa perfectamente la riqueza cultural que compartimos en esta región fronteriza. La raia no nos separa, sino que también nos une en una tradición musical que trasciende fronteras. Sentir el calor del público de Badajoz y compartir mi música en este contexto es algo que siempre me llena de emoción y gratitud.
¿Qué podremos oír, cómo podremos sentir y emocionarnos en este concierto?
En este concierto podrán escuchar una fusión profunda de sentimientos, donde el fado y toda mi percusión musical se entrelazan en una danza de emociones. Mi objetivo es transportar al público a través de las historias y los sentimientos que cada canción, que cada fado lleva consigo, haciendo que cada nota resuene con el alma. Espero que sientan la intensidad y la belleza natural de esta tradición musical que es el fado pero también la sonoridad que fue construido al luego de más de 20 anos, sonoridades aunque diferentes, comparten una pasión y una profundidad muy propia y personal.
“La raia no nos separa, sino que también nos une en una tradición musical que trasciende fronteras”
El flamenco, a través del Porrina de Badajoz, está conectado desde hace mucho tiempo con el fado, ese que mantuvieron con Amalia Rodrigues ¿Qué les hace únicos y universales y a la vez tan característicos?
Lo que hace único al flamenco y al fado es su capacidad de transmitir las emociones humanas más profundas: el dolor, la alegría, la melancolía y la esperanza. Ambos géneros tienen una raíz muy profunda en la historia y la cultura de sus pueblos, lo que les da esa autenticidad y carácter distintivo. La conexión con figuras icónicas como Porrina de Badajoz y Amalia Rodrigues subraya esa universalidad que ambos estilos musicales tienen, haciendo que cualquier persona, sin importar su origen, pueda sentirse identificada con ellos.
Al principio te costó asumir el ritmo frenético de tu profesión, pero con el tiempo se te considera la embajadora del fado, con un sello tan personal como el de Made in Mariza. ¿En qué punto, y más después de la pandemia, te encuentras en este nivel profesional?
La pandemia fue un período de reflexión y crecimiento personal y profesional. Me permitió reconectar con mi esencia y redescubrir lo que realmente significa el fado y la musica para mí. Hoy, me siento más conectada que nunca con mi música y mi público. He aprendido a equilibrar el ritmo de mi carrera con mi vida personal, lo que me ha dado una perspectiva renovada y una energía que se refleja en mis presentaciones. Estoy en un punto donde me siento fuerte y lista para seguir explorando y compartiendo mis sonoridades con el mundo.
“Lo que hace único al flamenco y al fado es su capacidad de transmitir las emociones humanas más profundas: el dolor, la alegría, la melancolía y la esperanza”
El fado y las nuevas generaciones, ¿seremos capaces de mantener la ilusión entre la juventud de esta música?
Estoy convencida de que sí. Las nuevas generaciones están cada vez más abiertas a explorar y apreciar sus raíces culturales. El fado, con su riqueza emocional y su profundidad, tiene un poder atemporal que resuena con cualquier persona, sin importar su edad. Creo que es nuestra responsabilidad, como artistas y como comunidad, mantener viva esa llama y hacer que los jóvenes se sientan parte de esta tradición, dándoles espacio para que también aporten su propia voz y perspectiva.
Mariza ¿qué canción tienes como banda sonora de tu vida?
Elegir una sola canción es muy difícil, pero si tuviera que escoger, probablemente sería «Ó Gente Da Minha Terra». Esta canción encapsula tanto de lo que soy y de lo que siento cada vez que subo al escenario. Habla de la nostalgia, del amor por nuestra tierra y nuestra gente, y de esa conexión emocional que es tan fuerte en el fado. Es una canción que siempre llevo en mi corazón y que siento como un reflejo de mi vida y mi carrera.