Un rato, un suspiro, una presencia distaste pero acompasada, en el espacio más bestia y genuino de su gira teatrera, el romano de Mérida, un enclave jadeado por miles de seguidores emocionados, un acierto del Stone & Music Festival como regalo musical. Robe Iniesta gira sentado con su falda revolera, vestigios de Extremoduro, más onírico, más pausado, más crítico, voz hecha jirones, puro Robe, toca la guitarra, sabemos de su paradero, desde lo lejos, escuchamos un suspiro, habla, sueña con su voz, la banda hace el resto, el público corea, el teatro disfruta en silencio, en un suspiro acompasado.
He notado una brisa pasajera
Que me ha dicho que tal vez, si quisiera…
Respira y noto su respiración,
habla y sueño con su voz,
Y con ella.
Aunque ya no esté, tengo mis razones
para ver que hay ocultas conexiones,
Si ella baila yo encuentro una canción que habla de nosotros dos.
Quédate en silencio y oye el ruido de mis tripas soñadoras,
Que sueñan con comerte a todas horas,
Ruge el deseo contenido.
Gira, y yo la espero,
se va y a la vida le pierdo el apego,
Y el juicio, y ayayay recupero
si encuentro un indicio de su paradero.
Robe Iniesta y su banda en el Stone Music Festival de Mérida. Canción “Un suspiro acompasado” del disco Lo que aletea en nuestras cabezas | Texto. Willy López |Fotografía. Félix Méndez