Que la construcción es un sector tradicionalmente de hombres no es ninguna novedad; así lo corrobora la Encuesta de Población Activa (EPA), en la que se menciona que la presencia de la mujer en este sector no llega al 9%. En contraposición, el Colegio Oficial de Arquitectos de Extremadura celebra los resultados de 2020, año en que se habría alcanzado la paridad real en las colegiaciones de arquitectos y arquitectas.
El Colegio Oficial de Arquitectos de Extremadura (COADE) ha querido dar luz a un balance de género sobre sus colegiados y colegiadas al hilo de la celebración del 8M y de la muestra ‘Arquitectas y Extremeñas’ que será inaugurada el próximo día 11 de marzo en la Sede del COADE en Cáceres, y podrá visitarse hasta el 26 de marzo.
DATOS ESTADÍSTICOS
En 2020 el COADE alcanzó la máxima paridad desde su nacimiento en 1981, esto es, un 49% de mujeres frente al 51% de hombres. A pesar de que este porcentaje puede resultar esperanzador los datos globales no son tan paritarios: 213 mujeres (28%) y 551 hombres (72%). Algo más de luz arroja el análisis pormenorizado por franjas de edad, que puede dar una idea de la tendencia a futuro y la perspectiva pasada que vamos dejando atrás: las arquitectas menores de 40 años alcanzan el 43% de representación, frente al 57% de arquitectos en la misma franja; en el otro extremo encontramos a las arquitectas mayores de 60 años, que tan solo alcanzan el 10% de total, dato que refleja el escaso acceso de la mujer, tanto a los estudios como a la profesión, hace tan solo unas décadas.
A nivel nacional la diferencia no es muy significativa, aunque hay que mencionar que los datos extremeños son algo menos paritarios que media nacional que se sitúa en 33.013 hombres y 14.742 mujeres, esto supone una presencia del 69% de arquitectos frente al 30,85% de arquitectas.
Ante los datos, se ha querido consultar a tres arquitectas de tres generaciones distintas sobre su percepción sobre la igualdad en el sector:
TESTIMONIOS
Monsterrat Zorraquino (69 años)
“En la arquitectura, las desigualdades de género siempre han existido y no tenemos más que ver que hay un porcentaje muy pequeño de arquitectas frente al de arquitectos de reconocido prestigio.” Añade: “En mi opinión las desigualdades no están como en otros sectores en salarios inferiores, al menos es lo que yo he constatado en mi experiencia profesional, sino en las dificultades de conciliación de la vida laboral y la personal o familiar”
Mercedes López (44 años)
“Rotundamente no [es un sector igualitario]. Pese a que en el curso de este siglo XXI el porcentaje de mujeres y hombres en las escuelas de arquitectura se haya equilibrado y que los resultados académicos de las arquitectas sean, de media, algo mejores que los de sus compañeros, en el ámbito profesional no se percibe esa igualdad, y abrirse camino en la profesión sigue siendo más difícil para nosotras. En el sector de la construcción la desigualdad es aún más acusada, al existir muy pocas mujeres desempeñando en las obras cualquier tipo de tarea que no sea la que ejercen las arquitectas o las arquitectas técnicas durante su ejecución.”
Irene Calle (37 años)
“Personalmente nunca he percibido experiencias de discriminación por género, al igual que compañeras arquitectas consultadas de mi generación en nuestra región; pero se debe seguir trabajando para que el sector de la construcción apueste por la horizontalidad y aproveche el talento como se comienza a conseguir en la arquitectura.”
ORGÁNOS DE GOBIERNO PARITARIOS y TECHOS DE CRISTAL
Hoy por hoy, la presencia de la mujer en las aulas universitarias supera el 50% (65% en el caso de Madrid); si echamos la vista atrás podemos decir que el camino ha sido largo: no fue hasta la década de los 80 y 90, debido los cambios sociales, políticos y económicos, cuando comienzan a apreciarse cambios cuantitativos en cuanto al acceso de las mujeres a la titulación de Arquitecta. Estos datos tienen sus consecuencias, ineludiblemente, en la representación institucional: por primera vez en casi un siglo de historia, la mesa del pleno de consejeros y consejeras del Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (CSCAE) es paritaria, con 8 mujeres entre los 18 consejeros. En Extremadura, el máximo órgano de gobierno del COADE también es paritario desde el 2017.
En la Junta de Extremadura también son varias las Direcciones Generales ocupadas por mujeres bajo estas titulaciones. “La otra cara de la moneda la podemos encontrar en los premios Pritzker, solo en cinco ocasiones ha sido concedido a una mujer y del mismo modo el Premio de Arquitectura Española, los Premios FAD o en las Escuelas de Arquitectura dónde el número de catedráticos sigue siendo superior al de catedráticas”. (M.Z.)
En esta misma línea “Desde luego que existe [un techo de cristal] Pese a la capacidad demostrada de muchas arquitectas para afrontar desafíos en un mundo eminentemente masculino, como lo es el de la arquitectura y la construcción, y a los logros obtenidos por muchas de ellas, la notoriedad pública de las arquitectas hasta hoy ha quedado eclipsada por el reconocimiento casi exclusivo a sus compañeros.” (M.L.) Y otra visión distinta aporta que “El sector de la arquitectura en España en general y en Extremadura en particular es un sector muy atomizado, en el que predominan los pequeños estudios, la mayoría sin empleados en plantilla. Esta estructura del sector no contribuye a proporcionar unas carreras profesionales con patrones claros de ingresos, consolidación, ascenso, promoción y acceso a puestos de responsabilidad. Por ello, es difícil sentir ese techo de cristal.” (I.C.)
SE BUSCAN ‘ALBAÑILAS’
A pesar de que el término está recogido en el DRAE, algunos portales de empleo tachan de sexista este perfil profesional, sin embargo, es justo lo que busca Laura Baquero en sus ofertas de trabajo: una albañila. La arquitecta extremeña dirige en Madrid el proyecto empresarial, ‘Ella Construye’ (Premio Ideas Emprendedoras en 2018) cuya misión es fomentar la integración de mujeres en las obras, sobre todo en los oficios de la construcción (albañilería, fontanería, electricidad…) que es donde se produce la verdadera brecha de desigualdad, ya que en los puestos técnicos, administrativos, atención al público o dirección hay más presencia de mujeres. La empresa ofrece, especialmente a mujeres, formación de estos oficios.
INICIATIVAS POR LA IGUALDAD EN EL SECTOR
Próximamente la Comisión de Género del CSCAE publicará un estudio sobre la situación de las mujeres en la arquitectura en España, elaborado por Inés Sánchez de Madariaga, arquitecta y experta en género, en el que se pone el foco en las condiciones en las que arquitectos y arquitectas ejercen su trabajo, los obstáculos a los que se enfrentan y oportunidades que se vislumbran al reducir las desigualdades en una profesión que está inserta dentro de un sector tradicionalmente masculino.
También, en el ámbito del Observatorio 2030 del CSCAE se viene constatando la relevancia que tiene la perspectiva de género en el diseño de la ciudad y del territorio, línea de trabajo e investigación muy productiva en los últimos años que ha dado lugar a un gran número de ponencias y publicaciones. Ampliando de nuevo el foco al sector de la construcción en general cabe mencionar la campaña que la Fundación Laboral de la Construcción lanzará este año: “Imparables. Mujeres en la construcción”. Esta acción forma parte de las 170 medidas incluidas dentro de su Plan de Igualdad, destinadas a erradicar la discriminación directa o indirecta por razón de sexo entre trabajadoras y trabajadores; para conseguir la igualdad de derechos y oportunidades.
VISIÓN OPTIMISTA
El Colegio de Arquitectos, en consonancia con el objetivo 5 de la Agenda 2030, considera que la tendencia al alza en la consecución de los objetivos relativos a la igualdad real en el desarrollo profesional de la mujer en el ámbito de la arquitectura, aporta valor y enriquece nuestra labor al servicio de la sociedad extremeña y constata que estos cambios están siendo valorados positivamente por esta.
LA PRIMERA ARQUITECTA EXTREMEÑA
Recientemente se ha publicado un artículo en El País en el que se menciona el nombre de Mª Eugenia Pérez Clemente (nacida en Coria, Cáceres) como la primera extremeña que obtuvo el título de arquitecta en 1957 (Madrid); en el mismo artículo se menciona que murió joven motivo quizás por el que desde el COADE no tengamos constancia de ningún trabajo profesional. Sin embargo, podemos afirmar que María Eugenia fue toda una pionera en su ámbito teniendo en cuenta que la primera titulada en España fue Matilde Ucelay (1936) y durante las dos décadas siguientes tan solo cinco mujeres alcanzaron esta titulación. (Art. María Ovelar, El País, 2/12/2020).
FUENTES CONSULTADAS
Encuesta de población activa, Estudio de colegiación por género del COADE, Observatorio de la construcción, Construyendo igualdad ‘Mujeres con un Pritzker y otros premios de Arquitectura’, Ella construye, Olvidadas, ninguneadas, “depuradas”: así fueron las carreras de las pioneras de la arquitectura en España.
[AMPLIACIÓN DEL ESTUDIO DE GÉNERO DEL COADE]
En el estudio se ha analizado también la distribución geográfica de las arquitectas en el territorio extremeño, para tratar de esclarecer la situación real. En cuanto al tamaño de los núcleos urbanos, se han estudiado los datos según poblaciones mayores y menores 5000 habitantes, sin encontrar ninguna variación significativa manteniéndose la proporción de arquitectas en el 28% frente al 72% de arquitectos. Igualmente, dividiendo la comunidad autónoma en zonas geográficas, se observa una pequeña desviación de la media en la zona Noroeste de Extremadura, donde se cuenta con una representación de mujeres dedicadas a este sector quince puntos mayor que la del resto del territorio.
Fotografía. Obra de Beatriz Cáceres Marzal. Diseño de Alba Moreno Tomé.